De esta manera, se relaciona la logística con la gestión de la cadena de suministro (supply chain management o SCM), que implica la colaboración y coordinación de cada empresa con las anteriores y posteriores dentro de su misma cadena de suministro (logística integral), aplicando diversos sistemas y técnicas de optimización logística: just in time, lean manufacturing, sistemas SGA, minimización del stock garantizando la cadena-pedido óptimo y su frecuencia-, reducción del lead time de aprovisionamiento, stock de choque o avanzado, cross docking, etc.
Las TIC y el comercio electrónico abren enormes posibilidades en este campo. A modo de ejemplo, en operaciones B2B (business to business), grandes importadores gestionan sus productos almacenados mediante radiofrecuencia (RFID, que aporta ventajas de coste, seguridad, control y rapidez), permitiendo a sus clientes mediante claves de acceso a su web realizar sus propios pedidos y conocer el estado real de sus existencias. Una vez realizado el pedido on-line, se produce la orden automática de preparación del mismo, transporte, entrega al cliente, confirmación de la recepción y facturación.